lunes, 31 de marzo de 2008

El fenómeno tecnopolo

Por Vidal ELÍAS ©
Marzo 2008 (Versión preliminar / Sin editar referencias)

Las primeras preguntas importantes a las que nos enfrentamos son: ¿Qué es un tecnopolo? ¿Cuáles son las ventajas comparativas – competitivas que hacen la diferencia vs. los parques industriales tradicionales? ¿Por qué si ampliamente se reconocen sus bondades no se han desarrollado en todos los países? ¿Cuáles son sus principales impactos? ¿Qué es un tecnopolo o parque científico – tecnológico? Un parque tecnológico puede ser definido como un desarrollo cuya base en gran parte es inmobiliaria, situado en un medio físico y ambiental de alta calidad, en el cual se congregan industrias y empresas cuya base es científica – tecnológica primordialmente.

Debido a la naturaleza de estos desarrollos (énfasis en actividades que promocionan el crecimiento de la investigación básica, la comercialización de tecnología y generación de empresas cuya base es el conocimiento), se ubican adjuntos o a corta distancia de una universidad y/o centros de investigación y desarrollo.

Dependiendo de la nomenclatura (tipo) del desarrollo y de su contexto, afiliación y focus, puede ser catalogado como tecnopolo, parque científico o tecnológico. Con relación a su tamaño, que varía de algunas a varios cientos de hectáreas o ser una concentración sumamente importante, puede llegar a ser inclusive una ciudad per se, es lo que se conoce como Tecnopolis o inclusive en ocasiones son desarrollo verticales como el Polytechnic University’s MetroTech Center en Brooklyn, o el Northwestern University’s Evanston Research Center. Es importante insistir que estos desarrollos son esencialmente negocios inmobiliarios con un fuerte programa de desarrollo empresarial – industrial cuya base es científica y tecnológica, el cual toma ventaja del capital intelectual (conocimiento generado en las universidades y centros de investigación y desarrollo), lo cual a su vez como producto paralelo tiene un gran impacto en el desarrollo regional y económico y en las políticas de gestión y administración territorial.

Al final del proceso, el tecnopolo o parque transita de lo inmobiliario a procesos de innovación.La inversión es en promedio de 10 a 15 millones de dólares, la cual se capitaliza en un horizonte que en ocasiones llega a los 15 años, período que va desde la concepción hasta la madurez del proyecto. Es sumamente importante que cualquier proyecto de tecnopolo se base en estudios de factibilidad técnica y financiera profesionales, además de la preexistencia de dos factores básicos: uno, capital que no se requiere recuperar inmediatamente (patient money) y dos, las condiciones para atraer organizaciones de investigación y desarrollo tecnológico.

Las incubadoras de empresas son en multiples ocasiones el primer paso a construir, las que representan el semillero de empresas / industrias a instalar en el futuro tecnopolo o parque científico o tecnológico.Ambos -el tecnopolo e incubadora-, son espacios en los que se concentran y concurren situaciones comunes, como son: trabajo intensivo y de tiempo completo, subsidio inicial, un ambiente de trabajo excelente y revisión y adecuación constante de los planes de desarrollo inmobiliario y el de negocios propiamente derivado de la generación de empresas, lo cual es a su vez, el negocio para la incubadora.

La principal diferencia a destacar entre las incubadoras y tecnopolos, es que las primeras son la parte de la cadena en la cual se inician las próximas empresas a través de start – ups y emprenderores; mientras que el tecnopolo es en gran medida un negocio inmobiliario para industrias y empresas existentes, las cuales en ocasiones son también generadoras de start – ups y spin – offs.

Ambas instancias, coinciden en los objetivos de transferir y comercializar tecnología (conocimiento) y otorgar el soporte financiero, legal y técnico para la creación y maduración de empresas, las cuales estarán inmersas en un mercado totalmente liberalizado y en procesos acelerados de innovación tecnológica. El factor clave para ambas instancias, es su relación permanente (asociación) con una o varias universidades y centros de investigación.

Acorde con la Asociación Internacional de Parques Científicos (IASP por sus siglas en inglés) el concepto general de parque científico o tecnológico se define como un proyecto dotado de un espacio físico, el cual:

i. Tiene relaciones de colaboración con universidades, centros de investigación y otras instituciones de educación superior
ii. Ha sido concebido para fomentar la creación y crecimiento de industrias innovadoras basadas en la tecnología y empresas del sector terciario con alto valor agregado
iii. Dispone de un equipo permanente de gestión que participa activamente en potenciar la transferencia de tecnología y generar capacidades de negocios para las empresas usuarias del parque.

Existen diversos modelos de parques o polos científicos – tecnológicos:

i. Aquellos netamente científicos y académicos, como las llamadas ciudades de la ciencia, hasta los modelos tecnológicos
ii. Los que están dirigidos a la generación de productos y procesos (medios) innovadores
iii. Los dedicados a la diversificación de bienes y servicios que comprenden inclusive ramas como la gastronomía y el turismo
iv. Los diseñados para reactivar una zona industrial en declive
v. Los que se insertan en una región industrializada deprimida o que necesita la generación de nuevos empleos especializados

Derivados de su diseño los tecnopolos son:

i. Aquellos enfocados a un área cerrada o específica (como en un campo militar)
ii. Los orientados a desarrollar una ciudad o región (en ambientes urbano o rural)

Por su origen y estructura financiera – legal los tecnopolos se pueden ordenan en:

i. Universitario, empresarial, gubernamental o mixtos
ii. Sociedades anónimas, fideicomisos, fundaciones o mixtos

Con todos estos factores, se concluye que los elementos constantes presentes en un parque científico o tecnológico, son al menos:

i. Un espacio físico (lo inmobiliario)
ii. Una universidad asociada (donde se generan el conocimiento y los recursos humanos)
iii. Un equipo de gestión cuyas funciones se extienden más allá de las actividades inmobiliarias (facilitadores)
iv. Usuarios “seleccionados”; es decir, empresas innovadoras bajo el concepto green, con tecnología avanzada y productos conteniendo alto valor agregado cuya base es el conocimiento

Los tecnopolos son una oportunidad innovadora enfocada al desarrollo económico que involucra fuertes lazos de comercialización tecnológica con la participación efectiva de iniciativas del sector público y privado para crear infraestructura nueva orientada al crecimiento económico, diversificación de mercados y un alto nivel de competitividad global.

Los tecnopolos están desarrollando a su vez un nuevo concepto de ciudades, están originando ciudades globales con un fuerte componente de innovación y actitud emprendedora.Esto ha implicado que la infraestructura de comunicaciones y urbana evolucione con un importante espectro de oportunidades para realizar empresas y negocios cuya base es científica – tecnológica alrededor de un punto focal geográfico bien definido.

Con relación a su significado etimológico, tecnopolis proviene de dos palabras griegas: technis y polis, las que en un sentido estricto significan originalmente el estudio del arte y la ciudad, lo que significaría la ciudad que persigue el estudio de las artes.

Acorde con Bob Hodgson (1992), el uso común de esas palabras ha reemplazado esa definición, en donde las artes de la ciencia y las aplicaciones del conocimiento científico son las fuerzas directrices de la actividad económica. Continuando con Bob Hodgson en ocasiones, la palabra polis ha sido reemplazada por pole -en technopole- la cual es también de origen griego que significa pivote o eje, pero en ocasiones es también cielo. Estas ideas nos dicen entonces, que tecnopolo es una ciudad en donde la tecnología subyace o pivotea, o la ciudad en donde se busca -a través de las artes de la ciencia y tecnología- no únicamente el conocimiento y la innovación, sino la dimensión humana que esto conlleva.

Esta parte última, la sociedad, es uno de los factores más importantes que los tecnopolos o tecnopolis favorecen: Es el redimensionamiento de las relaciones entre la generación, transferencia y comercialización del conocimiento (technis) y la sociedad -en la polis- a través de un eje o pivote -el pole-.

Los tecnopolos son una forma emergente de desarrollo especializado. Los tecnopolos están considerados -más que una aglomeración tipo High – Tech Cluster-, como un ejercicio de planeación y un centro para la producción de la industria de alta tecnología que provocan sinergias entre universidades, institutos de innovación e investigación y la industria demandante de innovaciones cuyo afán es permanecer inmersa con altos niveles de competitividad en una economía global altamente disputada.

Los tecnopolos influyen en las colectividades locales y regionales mediante el establecimiento de empresas de base científica y tecnológica asociadas a instituciones de educación superior e investigación cuyo propósito es favorecer el desarrollo socio – económico del entorno en que estén instalados.Son regularmente ciudades – región que integran las actividades de diferentes participantes universitarios, del sector público y privado que comparten objetivos por instalar un polo de excelencia regional en el que se desarrollen uno o más temas ligados a la innovación, investigación científica y desarrollo tecnológico.

Sin haber sido su propósito inicial, los tecnopolos han contribuido a construir nuevas y mejores comunidades. Otros efectos de los tecnopolos son en base a la identificación de tres necesidades centrales (Michael Wakelin, 1992):

1. La necesidad de establecer infraestructura avanzada en regiones estratégicas
2. La necesidad de concebir un proyecto como el mecanismo de vinculación y ligue entre su región y actividades en cualquier parte del mundo
3. La necesidad de reconciliar los aspectos o ámbitos local – regional con una visión global

Lo importante es saber cómo integrar estas tres necesidades para construir comunidades con base tecnológica o, cómo convertirles en elementos definitorios de una política pública en materia de desarrollo. Uno de los factores importantes para responder lo anterior, se basa en la selección de la región en la que se ubica el tecnopolo, ésta región estratégica deberá ser entendida como “el área de oportunidad económica y como puente geoeconómico”.

Las tecnopolis están evolucionando constantemente y obteniendo una importancia cada vez mayor en lo que se refiere a la construcción de una red de conocimiento que genera las condiciones para el crecimiento de un mercado económico con base en ciencia y tecnología en regiones estratégicas con alcance mundial. Este fenómeno está impulsando al mismo desarrollo regional a una globalización.

Dada esa evolución acelerada, el tecnopolo podrá ser en el futuro la forma de describir un campus científico, una ciudad de la ciencia o cualquier high – tech cluster. Esto nos conduce a John Naisbitt cuando afirma que:

“Las verdaderas ciudades globales no serán las más grandes, sino las más inteligentes”… y, añado, por consecuencia las más competitivas.

Wakelin define cinco pasos críticos a seguir en la construcción de este tipo de ciudades globales / competitivas:

1. Elección de la región estratégica (lugar en la economía global)
2. Existencia de lazos globales (global networks)
3. Integración de infraestructura (Megaproyectos)
4. Generación de oportunidades económicas (Tecnopolo = Global city)
5. Implementación de una estrategia global (quiénes la constituyen y construyen)

Por su parte, James Hudak (1992) identifica cuatro tendencias fundamentales para el desarrollo social y económico que madurarán en este siglo:

1. La internacionalización de las economías y negocios
2. El incremento de la tasa de innovación tecnológica
3. La importacia de la información en general y, en particular, la información tecnológica para cualquier actividad económica (así como su flujo)
4. El envejecimiento de las sociedades en las naciones industrializadas

Con algunos argumentos similares, John Naisbitt resume la transformación de la economía globalizada a través de diez megatendencias cuyo énfasis radica en la importancia estratégica de la información, de la innovación tecnológica y de las nuevas formas de gobierno.

Integrando los criterios de Wakelin, Hudak y Naisbitt es factible esquematizar los tres elementos básicos indispensables en la construcción de la identidad propia de los tecnopolos, cuyo nivel de eficacia será mayor o menor según sea el nivel de competitividad de la región en que se instalen.

2 comentarios:

ALEXANDER dijo...

BUEN DIA DON VIDAL, exelente comentario de tecnopolo me encantaria saber mas del tema, si me puede colaborar mil gracias..

Vidal Elias dijo...

Con todo gusto, pero necesito saber cuál es el enfoque y para qué necesita la información. Saludos, Vidal ELÍAS